AGUAMADERA

Aguamadera, un refugio sagrado que ofrece una estancia de lujo silencioso, fusiona perfectamente la naturaleza, la calidad y el confort. La comida, el arte y el sonido amplifican la esencia de la vida holística en este hogar escondido. Su simplicidad se convierte en un santuario para la curación: el interior combina la artesanía artesanal con elementos modernos. Paredes encaladas, largas mesas de madera y un diseño industrial icónico convergen en un ambiente relajado pero refinado. Construida en 1888, la finca del siglo XIX descansa en una colina rodeada de valles, bosques de pinos y evocadoras plantas cerca de Cala Llonga. El hotel consta de siete habitaciones y cuatro corrales renovados. Una chimenea acogedora, cocina a leña preparada con productos locales cultivados en casa, reuniones musicales en vivo y tratamientos regenerativos no invasivos ofrecen experiencias duraderas de bienestar. Un ágora para exposiciones y eventos, Aguamadera trasciende fronteras y atrae a huéspedes de todo el mundo a un sentido compartido de hogar.